Las tarjetas de visita son una manera fácil y directa para presentar tu negocio al tiempo que proporcionan información de contacto, y a menudo son la primera impresión de un negocio que un cliente potencial recibe. Una tarjeta de presentación debe transmitir una sensación de calidad y profesionalismo así como atención por los detalles. Todo comienza con la elección de la cartulina que una empresa elige para la tarjeta.

Cartulina
El término correcto cuando se habla de tipos de papel para tarjetas de visita es «cartulina», aunque algunas imprentas utilizan el término «papel de portada». La cartulina lleva un rango de peso de papel de 80 a 110 libras (36 a 50 kg). Son formas más robustas de papel y de mejor resistencia a la manipulación excesiva, lo cual es importante para las tarjetas de presentación. Cuanto mayor sea el peso del papel en una tarjeta, más rígida ésta será, mientras que cuanto menos pese este material, más endebles serán las tarjetas. Por lo general, un peso más pesado cuesta más. El tipo de cartulina (mate, brillante, fotográfica, con relieve) también determina la calidad y el costo de la tarjeta de visita.

Cartulinas mate
Las cartulinas mate son uno de los artículos más frecuentemente elegidos para las tarjetas de visita que ofrecen acabados lisos y sin brillo. Las mismas vienen en una amplia gama de colores, pero se encuentran más comúnmente en blancos, cremas, beiges y tostados. Las personas que seleccionan los tonos de color de este tipo deben ser conscientes de que las letras no son tan nítidas como las impresas en tonos neutros. Las cartulinas mate se imprimen en forma prolija, mientras que conceden al poseedor la capacidad de escribir en la tarjeta de visita en los casos en que se cambia o añade el nombre o el número de teléfono. Estos materiales a veces se llaman cartulina opacas, dependiendo del fabricante y la imprenta.

Cartulinas brillantes
Las cartulinas brillantes se ven comúnmente en las tarjetas de presentación. Las mismas tienen un recubrimiento acuoso que crea un acabado brillante y son las mejores para los colores claros y la impresión a doble faz. Estos cartones brillantes vienen en un amplio espectro de colores, dándole a una compañía más opciones para su tarjeta de visita. Las empresas que eligen este tipo de materiales pueden colocar fotos en el fondo o incorporar varias imágenes que se acerquen a la calidad fotográfica. La ventaja de utilizar las cartulinas brillantes es la longevidad de la tarjeta de presentación; el revestimiento acuoso protege a la misma de problemas comunes como daños por la humedad y desgarraduras. La desventaja es la incapacidad para escribir en las tarjetas de visita donde la información debería ser alterada.

Cartulinas fotográficas
Las cartulinas fotográficas se utilizan cuando una empresa necesita un acabado de calidad fotográfica en la tarjeta, como suele ser el caso con los agentes inmobiliarios, actores y modelos. Las mismas son el equivalente de una fotografía profesional, que ofrece una amplia gama de versatilidad para las compañías que buscan una impresión más sofisticada. Funcionan bien al mismo tiempo para tarjetas de una sola cara y de doble faz a todo color.

Con relieve
Las cartulinas con relieve pueden presentarse a la vez en cartones mates y brillantes. Las mismas tienen estampados impresos en la cartulina para darles una cierta sensación, como los tejidos de esterilla, los puntos o el diseño de cuadritos. Estos materiales vienen en una amplia variedad de colores y son a menudo utilizados por las empresas que buscan una dimensión táctil para su tarjeta. Las cartulinas con textura son las mejores para las tarjetas de visita de una sola cara. Las ventajas de las opacas con relieve es que son consistentes con aquellas de cartones mate estándar, mientras que las de textura brillante se pueden imprimir a doble faz. Una tarjeta de doble cara a veces puede ser abrumadora, de todos modos, y puede dejar a un potencial cliente confundido acerca del negocio.

Fuente