El mundo está inmerso en una revolución energética. Para satisfacer el aumento en la demanda de energía y seguir elevando o mantener los estándares de vida de cientos de millones de personas que han salido de la pobreza es necesario trabajar en el manejo sostenible de los recursos e incorporar fuentes de energía renovables, que no contaminen y limiten las emisiones. Esto permitirá frenar el cambio climático que amenaza especialmente a las sociedades más vulnerables.

ENERGÍA Y CAMBIO CLIMÁTICO
Los países industrializados están envueltos en un proceso de transformación de sus matrices energéticas y actualmente están incorporando de manera acelerada fuentes de energía renovables que aseguren su futuro y fortalezcan su independencia energética.
A la vez, se están desarrollando programas internacionales de transferencia de tecnología y de recursos financieros que promueven la adopción de nuevas tecnologías a nivel mundial. Estos programas permiten que los países en desarrollo adopten tecnologías más limpias y puedan reducir los índices de pobreza de manera más eficiente y sostenible que como lo hicieron los países hoy desarrollados.
La necesidad de acelerar la adopción de energías renovables (hidroeléctrica, eólica, solar fotovoltaica, geotérmica y termo solar) cobra gran importancia debido a que la quema de combustibles fósiles -en gran medida destinada a la generación de energía- es responsable del 57% de los gases de efecto invernadero (GEI), causa principal del cambio climático.

La maduración de las tecnologías y mercados de energías renovables ha reducido sus costos de generación, acercándolos -e incluso igualando en varios países- a los costos de generación de energía proveniente de la quema de combustibles fósiles. Dado que las energías renovables no generan las graves externalidades de la quema de combustibles -incluyendo las emisiones de GEI- son una solución superior para satisfacer las necesidades energéticas de la población.

ENERGÍAS RENOVABLES
Las energías renovables son fuentes virtualmente inagotables pues provienen de fuentes de gran capacidad energética y porque se regeneran de manera natural. Un mundo en expansión, en el cual mejoran los niveles de vida de amplios sectores de la población necesita expandir su acceso a fuentes de energía renovables para crecer en el presente sin devastar su futuro.
Las energías renovables son la mejor opción para dejar de usar combustibles fósiles como el Petróleo y sus derivados, el cual contamina, es cada vez más caro, no es renovable y genera emisiones de GEI, los cuales, por su uso exagerado, están causando y acelerando el cambio climático. Sólo en el Perú, de acuerdo a las cifras del Balance Nacional de Energía, se liberan alrededor de 2,550 Ton/hora de CO2 debido al consumo de energía de combustibles fósiles.

  1. Hidroenergía
    La energía renovable más económica en el Perú es la hidroenergía. El potencial técnico de la energía hidroeléctrica es alrededor de 9 veces la potencia instalada actual, y sus costos de generación son competitivos con otras fuentes de energía como la térmica. El Perú tiene una matriz eléctrica privilegiada gracias a la disponibilidad de los recursos hídricos, la gran biodiversidad y la cordillera de los Andes.
  2. Energía Eólica
    Otra fuente de energía renovable muy competitiva en el Perú es la energía eólica (viento). Existe un gran potencial para el desarrollo de la generación eólica. El mapa eólico peruano indica una capacidad de 22,500 MW. Actualmente, se han instalado parques eólicos en Cupisnique (La Libertad) yen Talara (Piura) de 80 MW y 30 MW de potencia. Además, se ha instalado el Parque Eólico de Marcona, en el departamento de Ica, de 90 MW, el cual llevará electricidad a alrededor de 30 mil familias en el país.
    Todos estos proyectos evitarán la emisión de unas 440.000 toneladas de CO2 al año y atenderán las necesidades de medio millón de consumidores.
  3. Programa de Recursos de Energía Renovable (RER)
    Desde el año 2008 el Perú viene implementando el marco promotor de las energías renovables alternativas en el Perú, combinando la hidroenergía con diferentes fuentes no convencionales -incluyendo el gas natural- para la generación de electricidad. El porcentaje de participación de RER alternativos comenzó con un 5% del total los cuales, sumados al 53% de hidroelectricidad, evidencian una matriz eléctrica cada vez más eficiente y sostenible en el Perú. El reto actual está en expandir este esfuerzo a sectores como el de transporte el cual -en el caso de la capital Peruana- está envuelto en una reforma para dotar a la ciudad de un sistema de transporte masivo más eficiente y menos contaminante, que adopte la electricidad, el gas natural y los vehículos híbridos.
    Adoptar las medidas identificadas en el RER evitarán depender de la importación de diésel y reducir nuestras emisiones de CO2.
    Además de las fuentes renovables mencionadas, el Perú tiene un gran potencial para aprovechar la energía Geotérmica, la Solar fotovoltaica, la Foto térmica y la Bioenergía.
  4. Diversificación de la Matriz Energética
    Las energías renovables estimulan la economía del país, contribuyendo al desarrollo del mercado de energía, generando empleos competitivos y fortaleciendo la infraestructura nacional. Llevan a diversificar la matriz energética reduciendo el riesgo de depender de una sola fuente de hidrocarburos. Contribuyen a la vez a mitigar los efectos del cambio climático y a fortalecer la resiliencia del país. Son inagotables y por lo tanto pueden ser utilizadas permanentemente. Complementan también el Plan de Electrificación Rural, pues son una excelente manera de llevar energía a muchos pueblos aislados, donde no llega la red convencional. Junto con la promoción de la eficiencia energética y el uso racional de la energía, la energía renovable es la mejor solución para mejorar la competitividad del país y mitigar y adaptarse a los efectos del cambio climático.